Una alternativa para visitar en esta temporada navideña es la Plaza de la Libertad, o "Freedom Plaza", que se abrió al público ayer a lo largo de más de dos hectáreas en un parque frente a la sede central de las Naciones Unidas.

La instalación, ideada por el artista británico Bruce Munro, se podrá ver durante doce meses y está compuesta por más de 18MIL esferas con tallo de fibra óptica de baja luminosidad que cambian sutilmente de color.

Los visitantes podrán pasear entre las luces en una experiencia inmersiva que pretende devolver a la ciudad de Nueva York la luz que perdió durante la pandemia de Covid-19.

"La obra no tiene otro propósito que ser una expresión de alegría en sí misma. La vida está llena de cosas terribles y yo pretendo que la gente se dé cuenta de que también existen cosas positivas en el mundo", explicó a EFE el artista.

Además, hizo hincapié en que las luces están hechas de materiales reciclables que se volverán a utilizar en otros proyectos, un gesto que responde a su intención de adaptar el arte a la naturaleza. 

El artista tuvo la idea de crear 'Field of Light' en un viaje a Australia, donde se sintió realmente vivo y conectado con el paisaje que lo rodeaba, lo que le llevó a imaginar un campo que florecía con suaves ritmos de luz en medio de la oscuridad.

Las luces están hechas de materiales reciclables que el autor volverá a utilizar en otros proyectos.

La experiencia inmersiva, patrocinada por la Fundación Soloviev y organizada junto a The Hope Program, ha conseguido vender todas las entradas para visitarla de aquí a febrero.